La piedra de la paciencia (Sangue sabur) – Atiq Rahimi

Siruela, 2009. Premio Goncourt, 2008.
Escritor afgano radicado en París, 1962.

Atiq Rahimi dedica esta obra a Nadia Anjuman, “poetisa afgana salvajemente asesinada por su marido”.

Cimentada en una estructura narrativa sencilla y muy visual, donde predomina el monólogo de una mujer, es también, principalmente, una novela que denuncia al fundamentalismo que puede tener lugar en cualquier religión, aunque en este caso se refiera al Islam. Es por esto que se ubica, de acuerdo al autor, “en alguna parte de Afganistán, o en cualquier otro lugar”.

Un hombre se encuentra postrado en una habitación, en estado vegetativo, ya que recibió un disparo en la nuca. Su mujer lo cuida celosamente, vigila el intervalo del suero y la humedad de sus ojos dependiente del colirio, mientras susurra la incesante oración que debe realizar por orden del mulá, desgranando el rosario una y otra vez, vuelta tras vuelta, acompasándolo con las respiraciones del enfermo.

Todos la han abandonado, la familia de su marido ha rehusado hacerse cargo de ella y de sus dos hijas pequeñas; sólo cuenta con el apoyo de su tía, un personaje que ha sufrido una injusticia indecible.

Con el trivial y repetitivo transcurrir de los días van revelándose diversos aspectos cotidianos, mientras la mujer se esfuerza por continuar diligente y solícita, hasta que al fin se cansa de orar y de pedirle al hombre que recobre la conciencia. Es entonces cuando empieza a comunicarse realmente con él, tras años de matrimonio y opresión.

La mujer empieza a contarle detalles de su vida a un esposo que nunca se preocupó por conocerla, aprovechando la mirada perdida que no sugiere ninguna actividad interior. El intenso efecto catártico se manifiesta reforzado por un momento convulso, en el que los disparos, los bombardeos y la consiguiente destrucción circundantes no dan lugar al sosiego.

A través de visibles muestras de desesperación, se decide a hablar del insoportable sometimiento en el que ha vivido durante toda su vida, mientras limpia los restos del ataque que ha alcanzado a su hogar; mientras sortea la invasión de dos hombres fingiéndose prostituta para evitar la violación por parte de uno de ellos, al fin que “para los hombres como él, follar, violar a una puta, no es ninguna proeza”.

El tono y el ritmo de sus reproches y de su dolor van en aumento una vez que se decide a desahogarse. A los diecisiete años contrajo nupcias con un hombre ausente que peleaba la Guerra Santa, mientras ella padecía prácticamente secuestrada por una suegra que resguardaba celosamente su castidad. Después, bajo la tutela del marido, la vida no fue mejor.

Siempre maltratada, vejada, insatisfecha, culpable y víctima de una represión sexual sin límites, la mujer decide no guardarse nada, por lo que revela al hombre secretos insospechados, situaciones inconfesables por las que se vio obligada a atravesar para poder conservar la posición de esposa digna.

El esposo se ha convertido en una Sangue sabur:
De acuerdo a la novela, esta piedra se encuentra en La Meca y miles de peregrinos acuden a ella para descargar todas sus desgracias. Un día la piedra reventará, y los dolientes quedarán liberados.
“Sabes, una piedra que pones delante de ti… ante la cual te lamentas de todas tus desgracias, todos tus sufrimientos, todos tus dolores, todas tus miserias… a la que confías todo lo que llevas en el corazón y que no te atreves a confesar a los demás…”


La mujer, una vez aliviada y consolada ante el horror provocado a sí misma por la dimensión de su volcánico discurso, exclama: “Esta voz que emerge de mi garganta es la voz sepultada desde hace miles de años.”

El libro sostiene cierta tensión por medio de esta idea, ya que el lector se preguntará si el hombre, la simbólica piedra, explotará de alguna manera, emulando a su divino equivalente.
El contenido es impresionante, crudo y desolador, pero reitero que prevalece la simplicidad en la construcción del texto.

15 comments:

e. r. said...

Hola, Andrómeda,
después de goethe viene este libro. veo que tus lecturas están explorando lugares particulares, viendo qué hay. Espero que lo sigas disfrutando, por mientras aquí anotamos este libro en los pendientes, por si un día se cruza por ahí.
saludos

mario skan said...

Hola Andrómeda: lecturas testimoniales, a parecidas, de almas que ponen a prueba su fortaleza.Realmente, una historia fuerte, de un lugar del mundo que no conoce el sosiego.
Tomo nota de la autora
saludos

Libros y literatura said...

De nuevo, tu comentario me despierta ganas de leer un libro en el que jamás me habría fijado. Y probablemente no llegue a leerlo; es tan poco el tiempo y tantos los libros. Pero gracias a tu comentario ya me llevo algo de él.

Gracias.

Javier BR

RebecaTz said...

Hola, e.r., cierto que sigo explorando para ver con qué me encuentro, aunque la lista de pendientes más conocidos se sigue acumulando... :)
¡Un saludo!

Así es, Mario, se trata de una de esas historias que hay que tener presentes por ser, como dices, testimonio de lo que se vive en el mundo. Qué triste.
¡Saludos!

Gracias a ti, Javier, sin duda la selección de libros debe ser muy cuidadosa, ¡no hay tiempo que perder!
¡Un saludo!

Humanoide said...

lei tierra y cenizas, un librazo

RebecaTz said...

Gracias Humanoide, me preguntaba si sería buena esa novela, ahora voy a buscarla.
Leí en la solapa de La piedra de la paciencia que Tierra y cenizas fue llevada al cine (y premiada en Cannes en 2004) por el propio Rahimi. Espero conseguir la película también.
Saludos.

Lola said...

Jo, Andrómeda, me ha puesto los pelos de punta leer esta reseña. Es un tema que me resulta especialmente triste, ya es malo el maltrato a la mujer en una sociedad como la nuestra pero si piensas en la situación de todas aquellas que no tienen el mínimo respaldo... :( :( :(
A ver si un día lo leo, si me encuentro con ánimos.

RebecaTz said...

En verdad que es muy triste leer estas historias. Justamente hace unos días vi una noticia en la televisión que se relaciona con el fundamentalismo islámico: mujeres que se automutilan para no parecer deseables a sus esposos. :=0
¡No te lo pierdas!
Abrazos.

María said...

Tomo nota... y muy en cuenta. Este mes, el mes de las mujeres que desgraciadamente mueren en manos de la violencia ejercida contra ellas...es para pensar... y mucho. Muchas gracias,...trateré de encontrarlo por las librerías.
Desde luego, lo peor de este mundo es olvidarse de quien tenemos al lado...
Un beso gordo!!

Anonymous said...

Este libro lo busqué en la FIL y estaba agotado, pero ya están consiguiéndomelo en la librería. ¡Que ganas dan de leerlo después de leer tu reseña! ¡ya te contaré!
Un beso,
Ale.

RebecaTz said...

Hola, Ale, es un libro de construcción muy sencilla y de contenido demoledor, espero que te guste.
Gracias, ¡un abrazo!

Anonymous said...

Andromeda:
Lei el libro y me encantó. Realmente me dejó impactada...que triste historia de la mujer...
Un abrazo,
Ale.

RebecaTz said...

Me alegra que te haya gustado, Ale. Hay otras obras que abordan este tema, seguro las conoces porque se han vendido mucho:
Cometas en el cielo y Mil soles espléndidos, de Khaled Hosseini.
Yo leí la segunda y me gustó mucho. Aunque es una de esas obras, digamos, "bestsellerianas", tiene partes muy bien narradas y el contenido nunca deja de resultar sobrecogedor...
¡Un abrazo!!

Carmina said...

Un libro sin duda sobrecogedor, me ha gustado mucho, espero no sea lo ultimo que lea de este autor

RebecaTz said...

Carmina, yo he estado tratando de conseguir Tierra y cenizas, pero hasta ahora no he tenido suerte...
Un saludo.